Se trata de un partido amistoso, pero cuando se ven las caras las dos últimas campeonas del mundo el encuentro cobra una dimensión mayor. España y Alemania se citan este martes a las 20.45 horas en el Estadio Balaídos de Vigo para enfrentarse en un duelo sin nada en juego, pero en el que seguro que se ofrece un buen espectáculo. Sin la presión por obtener un resultado, la calidad de los jugadores puede explotar sin ataduras. Lo analizamos en clave de apuestas deportivas.
Por el estilo de juego de ambas selecciones se espera un duelo abierto y con ocasiones en las dos porterías. Ninguna de las dos selecciones tiene una tendencia defensiva. Más bien todo lo contrario. Son dos equipos que buscan la portería rival continuamente. Por lo que esas filosofías de juego favorecen la llegada de ocasiones en ambas áreas y, probablemente, también de goles.
En el caso de España, Vicente Del Bosque está trabajando para lograr un estilo más directo y vertical. España era una selección que dominaba los partidos, pero en ocasiones pecaba de una horizontalidad excesiva. Como los rivales aprendieron a defenderla, Del Bosque ha iniciado un cambio, que pasa por construir una España mucho más agresiva. Ya intentó implementar ese estilo en el Mundial de Brasil 2014, pero no contaba con las piezas adecuadas.
Ahora, la nueva generación parece más dispuestas a desarrollar ese tipo de fútbol. Los Paco Alcácer, Nolito y compañía están con hambre de gloria y quieren gustar con su fútbol ofensivo. Aunque el testigo de estrella lo ha recogido Isco. El malagueño brilla en la sala de máquinas. Hace jugar a los demás y juega él con sus regates y filigranas.
Contra una Alemania plagada de bajas, España podrá poner en práctica esta nueva versión mejor que contra cualquier otro, puesto que los alemanes no le harán ascos al balón. Se espera un partido que sea un toma y daca, con dos equipos dispuestos a vencer al otro por KO. Así que por ello gusta la cuota de Más de 2,5 goles a 2.00.
